LED ZEPPELIN - Celebration day (Atlantic 2012) *****
La canción (felizmente) sigue siendo la misma
La fría estadística dice que Celebration day se grabó el 10/12/2007 en el marco del concierto tributo a Ahmet Ertegun, el legendario presidente de Atlantic Records, responsable de llevar al estrellato a figuras de la talla de Ray Charles y Frank Zappa
El desafío era de por si inmenso. Una de las bandas más grandes de la historia, con una altísima reputación en vivo, reunida por única vez después de casi dos décadas. Los intentos de reunión anteriores (1985 en el Live Aid de Philadelphia y 1988 en New York) estuvieron muy por debajo de las expectativas y fue realmente sorpresivo el anuncio de su reunión luego de tanto tiempo
De todos modos, cada una de las especulaciones queda absolutamente de lado al oír los primeros acordes de Good tomes bad times (tema que, no casualmente, abría su primer disco de 1969). Y la verdad es que parece que el tiempo no haya pasado.
Celebration day (que además de verse en cines en formato digital, se puede conseguir en DVD/CD y Blue Ray) presenta temas de casi toda la carrera de la banda, tornando el repertorio impagable. Obviamente que quedaron muchas gemas afuera como Heartbreaker, The lemon song, Communication breakdown e incluso el tema que titula el disco. Pero de todos modos las canciones elegidas hacen honor al legado de Zeppelin, en especial In my time of dying (la canción más larga del catalogo zepelliniano ), la cual resulta impresionante, con precisos cambios de ritmo marcando la gloriosa vuelta a las zapadas estructuradas de los clásicos shows de antaño. La otra sorpresa viene por el costado funk de Trampled under foot donde John Paul Jones la rompe con su más que característico acompañamiento de teclado. Jones además demuestra que es un bajista extraordinario que no se remite a seguir la base, sino que crea sus propias melodías y arreglos, además de destacarse en las orquestaciones en temas como No quarter y Kashmir.
De todos modos, cada una de las especulaciones queda absolutamente de lado al oír los primeros acordes de Good tomes bad times (tema que, no casualmente, abría su primer disco de 1969). Y la verdad es que parece que el tiempo no haya pasado.
Celebration day (que además de verse en cines en formato digital, se puede conseguir en DVD/CD y Blue Ray) presenta temas de casi toda la carrera de la banda, tornando el repertorio impagable. Obviamente que quedaron muchas gemas afuera como Heartbreaker, The lemon song, Communication breakdown e incluso el tema que titula el disco. Pero de todos modos las canciones elegidas hacen honor al legado de Zeppelin, en especial In my time of dying (la canción más larga del catalogo zepelliniano ), la cual resulta impresionante, con precisos cambios de ritmo marcando la gloriosa vuelta a las zapadas estructuradas de los clásicos shows de antaño. La otra sorpresa viene por el costado funk de Trampled under foot donde John Paul Jones la rompe con su más que característico acompañamiento de teclado. Jones además demuestra que es un bajista extraordinario que no se remite a seguir la base, sino que crea sus propias melodías y arreglos, además de destacarse en las orquestaciones en temas como No quarter y Kashmir.
En el aspecto individual, Robert Plant es el que la tiene más difícil a sus 64 años. Su despliegue físico obviamente no es el de antaño, al igual que su registro vocal, pero el rubio cantante aun puede alcanzar los registros más altos gracias a su técnica y descolla en el blues lento Since I´ve been loving you Jason Bonham honra el legado de su padre, no solo viene estudiando su forma de tocar la batería desde niño, lo que lo hace replicar a la perfección difíciles pasajes como The song remains the same y Whole lotta love, sino también se anima a acompañar en las voces a Plant, dándole otro color a temas como Misty mountain hop
De todos modos la estrella del show es la guitarra de Jimmy Page, quien se planta como lider absoluto de las canciones. El guitarrista es el alma de la banda. Su estilo hizo mella en toda una generación de hard rockeros y su impronta sigue siendo influyente 45 años después. En vivo sigue basando su estilo en la improvisación, lo que lo lleva muchas veces a pifiar (algo que ya había quedado registrado adrede en los discos de estudio) en pos de salvaguardar ese feeling tan característico de sus solos
Si nos dejamos guiar por las más recientes declaraciones de la banda parece que este show fue finalmente el canto de cisne para Led Zeppelin, pero miles de fans alrededor del mundo no pierden las esperanzas.
Y por lo visto y escuchado en Celebration day, razones no faltan
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